Click acá para ir directamente al contenido

Abogado de Rodrigo Rojas Vade reveló su verdadero diagnóstico: Sífilis, trombocitopenia inmunitaria y enfermedad de Behcet

  • Jueves 16 de septiembre de 2021
  • 09:20 hrs

Tomás Ramírez, abogado del constituyente que confesó haber fingido tener cáncer porque padece otra enfermedad que es "discriminada", reveló públicamente su historial en una entrevista.

El abogado de Rodrigo Rojas Vade, Tomás Ramírez, reveló cuál es el verdadero diagnóstico del integrante de la Convención Constitucional, luego de que reconociera que nunca tuvo cáncer.

El profesional aseguró que Rojas Vade ha padecido varias enfermedades en los últimos años, puntualizando que el primer diagnóstico que tuvo fue sífilis, que corresponde a una infección bacteriana.

“Su versión sobre que tenía cáncer comienza en 2013 con el diagnóstico de sífilis, pero algunos síntomas continuaron apareciendo en sus siguientes hospitalizaciones, por lo que mantuvo la misma versión desde esa época”, explicó en conversación con El Mercurio. 

“Sus diagnósticos fueron cambiando, desde síndrome disentérico, síndrome emético, reacción adversa a medicamentos, síndrome vertiginoso, entre otros. Ha tenido dos diagnósticos que se reiteran: la Enfermedad de Behcet y la Púrpura Trombocitopénica Ideopática. Esto no implica que sea su diagnóstico definitivo, sobre todo teniendo presente que ahora, con toda la información, probablemente deba reiniciar un trabajo con distintos especialistas”, agregó.

En cuanto a la deuda, el abogado afirmó que Rojas Vade ha estado hospitalizado en varias oportunidades durante los últimos ocho años, por lo que ha requerido realizar grandes gastos médicos.

“La deuda se genera por los costos de hospitalización, de consultas médicas, exámenes y medicamentos, teniendo en consideración de que se trata de problemas que se arrastran desde hace ocho años. Fue despedido en abril de 2020 y después se organizó la rifa para ayudarlo económicamente”, precisó.

Finalmente, declaró que “a nuestro juicio, no debería tener efectos penales, pues no cometió perjuicio. Pero evidentemente es distinto que nunca haya tenido estos síntomas o que nunca haya recibido atención médica, en especial para las personas que han sufrido al enterarse que no tenía cáncer”.